Provocaciones haitinas prefabricadas

Las relaciones entre dominicanos y haitianos se han deteriorado visiblemente debido a los últimos acontecimientos ocurridos en Haití.

Luego de algunos hechos lamentables, los dominicanos comienzan a entender, a creer, que peligra la patria dominicana, la soberanía nacional.

Como popularmente decimos los dominicanos, nos han tomado “asando batatas”, pues pensábamos que los haitianos, estaban muy agradecidos de todas la ayudas solidarias de los dominicanos cuando ellos fueron azotados por el terremoto en 2010, hace cinco años. Nadie, ningún país en el mundo les llevó consuelo, amor, solidaridad, o le dolió profundamente y lloró su tragedia, como si fuera propia, que los dominicanos, quienes también cooperaron económicamente.

Además, República Dominicana durante años ha permitido que muchas parturientas haitianas encuentren en nuestro país la ayuda sanitaria que en su nación no les ha proporcionado, usando así un alto porcentaje del presupuesto de Salud Pública. Muchos estudian en las escuelas públicas, donde reciben buenos tratos, su desayuno escolar. Y qué decir de los miles y miles de haitianos que han encontrado su sustento en nuestra tierra, sin rechazo “racista”, como dicen algunos interesados.

Hasta seguridad física, pues en su país además de la pobreza que les embarga, nadie puede decir que está seguro, la violencia en extremo funciona allí. Amén de que haitianos depredan nuestros bosques para hacer carbón y llevarlo a Haití, una costumbre muy de ellos, que puede apreciarse ampliamente en su propio país, mientras estudiantes dominicanos, empleados, funcionarios de diversas empresas se esfuerzan por reforestar el nuestro, con siembras de árboles y plantas.

Las últimas provocaciones en suelo haitiano, además de las excelentes campañas internacionales en contra de nuestro país, apoyadas directa o indirectamente por unos cuantos dominicanos, son actividades que buscan premeditadamente un detonante para que los dominicanos exploten, y así justificar una serie de acontecimientos, entre ellos, un posible envío de tropas militares internacionales que dará apoyo al plan de unificar la isla.

Los ideólogos de la unificación de los dos países, infiltrados por doquier, están fabricando problemas que puedan encender la mecha de los enfrentamientos. Aunque entre haitianos y dominicanos siempre han existido ciertos resquemores, durante las ultimas décadas la paz ha prevalecido. Ha sido luego del fatal terremoto cuando comienzan a brotar resentimientos. Autora: Emily Tueni. Tomado del periódico hoy.com