«Ningún gobernante ha hecho tanto por las mujeres como Danilo Medina»

En ocasión del Día Internacional de la Mujer que se celebra hoy, el portavoz y director general de Comunicación del gobierno, Roberto Rodríguez Marchena, dijo hoy que ningún gobernante ha hecho tanto por las mujeres como Danilo Medina.  

Al destacar el rol protagónico que tienen la mujeres en el gobierno del presidente Danilo Medina, quien, en la campaña electoral dijo que no las abandonaría, Roberto Rodríguez Marchena dijo que «construimos patria también para mujeres y que en nuestra patria las mujeres tienen iguales derechos que los hombres»

A través de su cuenta Twitter, @RodrigMarchena, el portavoz del gobierno ponderó los esfuerzos que hace el gobierno de Danilo Medina en reducir la desigualdad en el acceso a las oportunidades.

A continuación los tuits de Roberto Rodríguez Marchena.

1-[Construimos Patria TAMBIÉN para mujeres] En nuestra Patria las mujeres tienen IGUALES DERECHOS que los hombres.

2-Por eso en el gobierno @DaniloMedina PONEMOS EMPEÑO en REDUCIR la desigualdad en el acceso a oportunidades.

3-Ningún gobernante ha hecho tanto CONCRETAMENTE por las mujeres como @DaniloMedina . Patria con y para las mujeres.

Mujeres que construyen Patria

Durante esta semana la Dirección General de Comunicación difundió 5 historias de mujeres, que constituyen un ejemplo al país, por su combatividad,  su afán emprendedor y su gusto por trabajar.

Estas mujeres, cada día se levantan a construir la patria dominicana y han contado con el apoyo decisivo de las políticas democratizadoras del gobierno las cuales se inspiran en la cercanía, la frugalidad y el amor al prójimo.

«En siendo cosa que se venda, yo me meto en toa», dice y convence Cándida Liberato, de El Ejido en Santiago. Tiene una fritura. Antes era una «cosita», ahora va “cogiendo forma” después de dos préstamos de Banca Solidaria.

Diez mil pesos la primera vez y quince mil la segunda recibió en crédito solidario, con lo que mandó a hacer unas puertecitas para darle otro aspecto al negocio; compró un freezer para llenarlo de jugos (“que se venden mucho”) y se abasteció de víveres y “equipajes”, es decir, paticas, cocotes, asaduras y mollejas.

Disciplinada en sus gastos, hábil en el cálculo de sus costos, aparta cada día 200 pesos en una latica para cumplirle a Banca Solidaria. “Yo soy buena paga”.

La pequeña vitrina se convirtió en todo un negocio gracias a la democratización del crédito.

Mujeres como Cándida, su historia que hoy compartimos, revelan la combatividad de las dominicanas, su afán emprendedor y su gusto por trabajar.

De ganarse el pan con el sudor de su frente y, en su caso particular, del sudor de toda su humanidad, porque bregar con candela el día entero prende a cualquiera de la cabeza a los pies.

La baja tasa de interés permitió que Cándida saldara su préstamo y recibiera otro.

Danilo Medina prometió en campaña y en gobierno ha cumplido con las mujeres dominicanas trabajadoras.

Les dijo que no las abandonaría y a su lado ha estado democratizando el crédito para sus pequeñitos y medianos negocios, implantando la tanda extendida, alfabetizando a centenares de miles, entregando estancias infantiles, protegiéndolas con seguro médico de SENASA, eliminando el copago en los hospitales, reduciendo el gasto de bolsillo en medicinas, creando empleos, dándole oportunidades en los sorteos de obras y compras públicas.

Con Banca Solidaria ha prestado cerca de 6,500 millones de pesos en 145,000 préstamos, en su casi totalidad a mujeres.

Odalis enviudó con 3 hijos. Perder la pareja será siempre devastador, sea por muerte, divorcio o separación. Lo será aún más si la persona vive en pobreza y es mujer.

Combatir en pareja el desamor sistémico de la sociedad (que se manifiesta muchas veces en no tener qué comer, desempleo, bajos salarios, falta de protección en salud, violencia, discriminación y desconsideración) permite defenderse en mejores condiciones y soñar con poder vencerlos.

Pero, mujer, sola y para más inri con 3 hijos, el calvario le estaba pintado (reservado) con letras mayúsculas. De más pobreza no la salvaba nadie.

Y no ocurrió así con Odalis Ureña. ¿Qué pasó para que ese «designio fatal» no se cumpliera?

La historia vale la pena contarla, hoy que estamos viendo como muchos dominicanos y dominicanas unidos al gobierno estamos construyendo la Patria que por muchos años soñamos y quisimos y que ahora se nos revela posible y verdadera. Una patria fundada en el amor al prójimo, patria de todos, con todos y para todos.

Dos factores intervinieron para cambiar el curso de lo que debió ser la historia de Odalis Ureña.

El primero fue la determinación de Odalis de no dejarse derrotar, la voluntad férrea por vencer la enorme adversidad que le cayó encima. Gigantesco esfuerzo respaldado por el amor de sus hijas y de su madre que le han brindado aliento permanentemente.

El segundo, la política de compras y contrataciones públicas del gobierno de Danilo Medina que favorece las compras nacionales con especial preferencia por las micro y pequeñas empresas de nuestros barrios y campos.

Sucede que gracias a esa política y a la decisión del gobierno de dotar de zapatos hechos en República Dominicana a los escolares de nuestro país y de paso salvar a la industria del calzado (muy buena pero menospreciada por gobiernos anteriores) JP Ramírez, pequeña empresa que fabrica zapatos en el barrio 24 de Abril de la Capital, ganó una licitación para hacer muchos de esos zapatos y tuvo que contratar más empleados, más obreros. Uno de ellos, Odalis.

La democratización del crédito ha beneficiado a cientos de mujeres dominicanas.

Lorenza dice que le gustaría ser un ejemplo para sus vecinos, en Villa Consuelo, Santo Domingo. Y lo es. Mujer extraordinariamente trabajadora, ha tenido éxito en el negocio de preparar comidas. Pero esto no es lo que la hace ser un ejemplo.

Lo que la hace ser un ejemplo es cómo ha conseguido lo que tiene y cómo lo gestiona. Con decencia, buena vecindad y mucho trabajo. Y comenzó con nada.

Para alcanzar el éxito nunca quiso reventar al que se le cruzaba en el camino, nunca quiso ni ha querido tratar a sus colaboradores, proveedores y clientes como enemigos.

A pesar de que la sociedad y las llamadas «leyes del mercado» la empujaban (la empujan todavía) a envilecerse, Lorenza Leiba conservó su alma intacta.

La política inclusiva y humana del Presidente favorece a las micros empresarias.

Ese ha sido su mayor triunfo.

Se siente plena, llena. «No me falta nada, tengo todo lo que necesito», confiesa.

El gobierno está al servicio de las dominicanas que a diario hacen Patria.

Servir a los demás, comenzando por su familia y vecinos, es su rutina. «Lo que más me gusta de mi trabajo es el servicio que le doy a los demás».

Lorenza Leiba es motivo de orgullo para otras mujeres y para muchos hombres también.

Con mujeres como ella y miles más construimos patria todos los días en los barrios y campos de la República Dominicana. Patria grande, solidaria y próspera fundada en el amor al prójimo.

En olla. Entre ollas. La casa entera fue almacén, recuerda Omayra, la hija. Al separarse del marido, Rafaela tuvo que salir a buscársela como una tora. Sus orígenes árabes (Asilis y Chaljub) la inclinaron por la cocina: enseñar y preparar comida.

Ella y sus dos hijos pasaron por muchas precariedades hasta lograr salir de la pobreza. Tiene casa propia, “decorada como yo he querido”, dice, y de cómplices a sus dos hijos que la admiran hasta la veneración.

Rafaela y sus hijos pasaron por muchas precariedades pero salieron de la pobreza.

“Mi madre ha sido una luchadora desde que me tenía en la barriga”.

Odontóloga de profesión, Rafaela es propietaria de AsilisImport y Export y distribuidora autorizada de la marca Royal Prestige en nuestro país.

Asilis Import y Export es distribuidora autorizada de la marca Royal Prestige en el país.

«Ella, cuando se enfoca en algo, hasta que no lo logra, nadie la detiene”, dice orgulloso su hijo Miguel.

Rafaela se ha beneficiado de la política de democratización del crédito del gobierno de Danilo Medina.

La Fundación Reservas del País facilitó 32 millones de pesos a la ONG Fondo Cooperativo para el Desarrollo Agroempresarial (FONDAGRO) para fondear su programa de crédito, la que a su vez otorgó un préstamo a Rafaela.

Mujeres como Rafaela construyen patria todos los días en barrios y campos de la República Dominicana. Patria grande, solidaria y próspera fundada en el amor al prójimo.

Celebramos el heroísmo de las maestras dominicanas, Antonia es una de ellas.

Educar es vocación para quienes conocen las virtudes libertarias del saber. «La educación es el otro nombre de la libertad» dice el presidente Danilo Medina cada vez que puede. Ser maestra le ha dado muchas satisfacciones. Educando, Antonia es feliz.

Labora en la Escuela «Club 12 Juegos» en Villas Agrícolas, Distrito Nacional.

Desde pequeñita, Antonia Rosario ayudaba a sus compañeritos vecinos con las tareas y con los temas que «no entendían». Ella se los explicaba.

Manejar bien los contenidos, ser paciente, tolerante, cariñosa y velar por el bienestar emocional de sus alumnos, es deber de una buena maestra, dice, «porque de eso depende su aprendizaje».

En esta historia que contamos hoy, sus alumnos hablan libremente de su maestra. Aprensiones iniciales, temores, hoy agradecimiento. La admiran. La quieren.

Como Antonia son muchas las maestras entregadas a su labor pedagógica en nuestro país. Todavía mal pagadas y no suficientemente valoradas por una sociedad, la dominicana, víctima injustamente de la frivolización y banalización que trajeron las políticas individualistas, ultracompetitivas y deshumanizantes del neoliberalismo.

El gobierno de Danilo Medina ha iniciado la revalorización de las maestras y maestros. Con la Tanda Extendida, con las Estancias Infantiles, con los programas de capacitación docente y las mejoras salariales más importantes de los últimos diez años, ponemos empeño en dignificar a maestros y maestras.

En Antonia, en ocasión del Día Internacional de la Mujer, celebramos el heroísmo de las maestras dominicanas que han educado a nuestros niños y niñas en  condiciones muy difíciles, no sólo en las aulas, sino también en sus propias casas.

Ellas construyen esa patria dominicana libre, solidaria, democrática, pacífica, fundada en el amor al prójimo que soñamos por muchísimo tiempo y que Danilo Medina está empeñado en dar todo de sí para hacerla realidad.