La vacuna contra el VPH y la sexualidad en las adolescentes

La vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) no parece tener impacto en la conducta sexual de las jóvenes que la han recibido

Se temía que la vacuna contra el virus del papiloma humano les diera a las chicas adolescentes un falso sentido de seguridad, y se involucraran en conductas sexuales riesgosas. Pero al parecer no hay relación entre el tipo de actividad sexual de las jóvenes y la vacuna. Según un estudio, la vacuna no hace que las jóvenes se vuelvan promiscuas.

El virus del papiloma humano (VPH), causa la infección de transmisión sexual más frecuente, y hay más de 100 tipos de virus diferentes del papiloma humano. Algunos tipos no causan problemas, pero otros pueden causar desde las verrugas genitales hasta el cáncer cervical. El VPH se contrae por medio de relaciones orales, vaginales o anales con una persona que lo esté infectada, aunque no tenga ningún síntoma.

Cualquier persona sexualmente activa puede contraer el VPH, aunque tenga una sola pareja. En la mayor parte de los casos, el VPH desaparece por sí solo, pero cuando no desaparece pueden surgir los problemas de salud.

Afortunadamente contamos con la vacuna contra el VPH, que protege contra ciertas variedades del virus que se asocian con el desarrollo del cáncer cervical y de las verrugas genitales.

Desde 2006, la vacuna contra el VPH está disponible en casi 100 países. Muchos de estos países tienen programas nacionales de esta vacuna cuyo fin es el de proteger a las jóvenes adolescentes del virus antes de que se vuelvan sexualmente activas. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos recomiendan que todas las niñas entre los 11 y los 12 años reciban la vacuna contra el VPH. De hecho, en 2013, empezaron a recomendar que los niños entre los 11 y los 12 años de edad la reciban también, ya que ellos también pueden desarrollar verrugas genitales y cáncer anal (en el caso de los hombres que tienen sexo con otros hombres) o pueden transmitirle el virus a las mujeres quienes podrían desarrollar cáncer cervical.

La vacuna protege de cuatro tipos del VPH que causan cáncer cervical y las verrugas ano/genitales. Por otro lado, esta protección podría infundir un falso sentido de seguridad entre las jóvenes vacunadas, quienes podrían creer que están “inmunizadas” contra toda clase de infecciones de transmisión sexual (lo que no es cierto), y se podrían involucrar en actividades sexuales de alto riesgo que podrían ser peligrosas para su salud.

Por otro lado, muchos padres piensan que vacunar a sus hijas adolescentes o preadolescentes es como darles permiso para que inicien su vida sexual antes de tiempo y se vuelvan promiscuas.

Pero un estudio reciente sugiere que estos temores son infundados, según las Dras. Leah Smith y Linda Lévesque, de Queen’s University, en Kingston, Ontario. La Dra. Smith, quien dirigió el estudio dice: “Los hallazgos sugieren que los temores de una conducta sexual riesgosa después de vacunarse contra el VPH no son válidos y no deben considerarse una barrera para que se vacunen las chicas jóvenes”.

En el estudio se examinaron a 260,493 chicas, la mitad de las cuales calificaban para un programa de vacunación contra el VPH que se ofreció durante los dos primeros años de escuela (2007-2008 y 2008-2009).

Los investigadores hicieron seguimiento de las chicas hasta el 31 de marzo del grado 12. Alrededor del 6% de las jóvenes quedaron embarazadas o contrajeron una infección de transmisión sexual entre el décimo y doceavo grado, (10,187 embarazos y 6,259 casos de infecciones de transmisión sexual no relacionados con el VPH).

El estudio se publicó en la revista profesional Canadian Medical Association Journal.

De acuerdo con la Dra. Lévesque, ni la vacuna VPH ni el programa de elegibilidad aumentaron el riesgo de embarazo ni de infecciones no relacionadas con el VPH entre las chicas de 14 a 17 años. Ella dice : “El resultado de este estudio puede servir para detener las preocupaciones de los padres sobre la vacunación contra el VPH y su relación con la promiscuidad”.

Como ves, es importante que protejas a tu hija o hijo adolescente o preadolescente contra el VPH, ya que puede dar lugar a enfermedades serias en el futuro. ¿Por qué tan pronto, si tu hija no ha iniciado su vida sexual? Precisamente por eso. Estará inmunizado(a) antes de que la empiece y se exponga al virus. Si una persona adquiere el VPH, la vacuna ya no funciona. Y, en cuanto a las chicas, no temas que por eso se sienta tan segura que se involucre en una actividad sexual riesgosa, que afecte su salud. Los estudios demuestran que no es el caso.Tomado: vidaysalud.com