Santo Domingo, RD.-La joven Leydi Marlenne Ogando Peña, de 28 años, ha sido diagnosticada con Leucemia Mieloblastica Aguda, cuyo tratamiento requiere quimioterapia, transfusión de sangre y plaquetas, y prepararse para un trasplante de médula ósea, lo cual su familia no puede sustentar por la precaria situación económica en que se encuentra.
Los médicos que tienen su caso en el Instituto de Oncología, Doctor Heriberto Pieter, le han explicado que está en la etapa ideal para recibir un trasplante de médula, que según cotizaciones de diversos hospitales de los Estados Unidos de América, tiene un costo de entre 875,000 a un millón 500 mil dólares.
También la paciente mantiene una deuda de RD$162,000 en el Heriberto Pieter, donde tuvo ingresada por dos meses recibiendo tratamiento de quimioterapia.
En ese sentido, Leydi Marlenne Ogando Peña ha recurrido a medios de prensa, a fin de que personas caritativas y de buena voluntad, políticos y empresarios, identificados con su causa, puedan hacerle un aporte económico, que permita juntar el dinero requerido, someterse a la referida intervención, y tener la esperanza de seguir viva.
Al describir su situación, la joven explicó que ayudaba como cocinera en una pequeña empresa familiar, pero que hace unos cuatro meses empezó a adelgazar y sentir mareos, por lo que decidió practicarse un chequeo médico, resultando con la terrible enfermedad.
Dijo que tiene muchos deseos de realizarse como mujer, tener una familia, y ser una persona útil a la sociedad, lo cual vería tronchado si no logra superar la condición de salud que le afecta.
Todas las personas sensibilizadas e interesadas en apoyar este caso, pueden colaborar haciendo su aporte mediante la cuenta 7792 769 63 del Baco Popular Dominicano, o llamando al teléfono 849-637-1075.
Ogando Peña reside en la calle Libertador, número 31, del sector El Libertador de Herrera, Santo Domingo Oeste.
«Tengo muchos deseos de vivir y por eso estoy tocando puertas, porque este pueblo es de gente buena y confío en que me van a ayudar en esta noble causa», indicó la tierna joven con lágrimas en los ojos.
De antemano, la muchacha agradeció las colaboraciones y ha solicitado que oren por su causa y le deseen los mejores resultados. “Me despido con la seguridad de que Dios les recompensará grandemente”.