Mediante las jornadas preventivas la población es orientada sobre la necesidad de mantener el entorno libre de objetos que puedan ser reservorios de agua limpia, que es el hábitat para reproducirse el transmisor del virus.
También la población es advertida sobre las consecuencias a la salud de almacenar el líquido y mantenerlo al aire libre, ya que se convierte en reproductor del insecto, así como conservar los patios limpios de basuras y escombros, lo cuales facilitan la reproducción de ratas y otras alimañas que luego entran a los hogares y pueden contaminar los alimentos.
Además de las promociones realizadas casa por casa, las autoridades invierten millones de pesos en la difusión de consejos preventivos mediante la radio, televisión y medios impresos y digitales; pero, los mensajes parecen no tener el efecto esperado.
Las orientaciones refieren los síntomas, fiebre alta, dolor de cabeza y cuerpo, y malestar general, al tiempo que advierten sobre la necesidad, en caso de presentar uno o varios de estos, de acudir al médico y no automedicarse en el hogar. En caso de que esto ocurra recomiendan el uso de acetaminofén, nunca consumir aspirina.
La inobservancia de estas recomendaciones estaría entre las principales causas de muertes por dengue, pues la población prefiere atenderse en la casa y cuando decide ver un especialista, a veces es demasiado tarde y por más esfuerzos que se hagan en los centros asistenciales resulta muy difícil la recuperación.
El escenario observado actualmente con la ocurrencia de casos y fallecimientos ha movido la preocupación de las autoridades de salud, que añaden a lo anterior un posible mal manejo de la enfermedad por parte del personal médico en los hospitales.
Igualmente, se agrega la inconsciencia en los barrios de vecinos que no asumen las recomendaciones provisorias y aunque otros mantienen sus espacios libre de criaderos de mosquitos, no obtemperan y se hacen los desentendidos.
Este lunes, la ministra de Salud Pública, Altagracia Guzmán Marcelino, declaró una alarma epidemiológica por dengue y anunció la intensificación de la campaña preventiva, que integrará a los cerca de dos millones de estudiantes de las escuelas públicas, quienes tendrán como tarea la eliminación de los criaderos de mosquitos en los patios de sus casas.
Los ministerios de Educación y Salud Pública han iniciado la Jornada Escolar sobre Prevención de Dengue y otras enfermedades tropicales debido a que el país está en una situación de alarma ante las muertes que ya suman 53, y el reporte de unos 4,500 casos probables, lo cual según la ministra Guzmán Marcelino deja clara la necesidad de que la población e instituciones que directa e indirectamente tienen responsabilidad se involucren en el control de vectores.
Señaló que los menores que fallecen en los hospitales del Gran Santo Domingo y otros centros, es porque desde el primer y segundo nivel no están aplicando la guía del manejo y diagnóstico de dengue.
“No pueden ocurrir fallecimientos, porque si ocurren es porque no hubo un manejo adecuado o no se orientó al familiar que llevó al pacientes, cuáles son los signos de alarma del dengue”, indicó la titular y reiteró que es necesaria la cooperación de todos para enfrentar el período de alarma, y disminuir las defunciones por la enfermedad a cero.
Sobre el tema, el infectólogo Jesús Feris Iglesias atribuye el brote epidémico de dengue que afecta el país al incumplimiento del presupuesto programado para la prevención y control de las enfermedades transmitidas por vectores.
Explicó que para el presente año en el presupuesto del Ministerio de Salud Pública se asignó la suma de 119.82 millones de pesos para ese capítulo, pero al mes de mayo sólo se había ejecutado 1.18 millones de pesos, equivalentes al uno por ciento de lo programado.
Dijo que su adecuada ejecución presupuestaria para la eliminación de los criaderos de mosquitos era fundamental para prevenir la epidemia, que se ha brotado en el país en un tiempo no epidémico.