La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), hizo un llamado a los ciudadanos y ciudadanas, religiosos y laicos, republicanos y nacionalistas, para que juntos exijan al Congreso Nacional que incorpore la corrupción pública como un Crimen Capital en el Proyecto de Código Penal: como manda la Carta Magna del Estado Social y Democrático de Derecho Constitucional.
La Constitución dominicana coloca la corrupción administrativa en la misma categoría de los crímenes de lesa humanidad y el genocidio, porque constituye un atentado contra la democracia, socava su legitimidad y afecta el derecho fundamental al desarrollo del pueblo.
La corrupción debe ser sancionada con la pena máxima como un crimen capital con las características que exigen los artículos 22, 75.12, 139 y 146 de la Constitución, según los cuales:
(1) Cualquier ciudadanos o ciudadana tiene el derecho a querellarse contra cualquier persona, funcionario o servidor público que sustraiga fondos públicos en su provecho o de otro (2) es a los acusados de corrupción que corresponde probar el origen de sus bienes (3) por ley se puede establecer que los crímenes de corrupción son imprescriptibles (4) las garantías procesales son restringidas (5) el condenado tiene que restituir los lo apropiado de manera ilícita y (6) además de las penas de prisión y multa el juez se obliga a imponer la degradación cívica que impediría al condenado ocupar una función pública de por vida.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos denunció que el país está posicionada con el record de uno de las naciones con mayor índice de corrupción, y que la impunidad campea por los fueros de una justicia ciega, sorda e indiferente, con unos legisladores que están alertas para incrementar las penas contra los de abajo, pero no legislan para sancionar a los políticos.
Es derecho a una administración pública honesta es un derecho constitucional de ciudadanía, es un deber fundamental velar por el fortalecimiento de la democracia, el respeto al patrimonio público y la transparencia en la función pública, exijamos a cada diputado a cada senador, con pancartas en cada pueblo, que sancionen el crimen de la corrupción como lo que es, un crimen de lesa humanidad.
Se recuerda que este martes se cumplía de manera exitosa el llamado a encender las luces de los vehículos, en protesta contra la corrupción, que desde las seis de la mañana convocó La Fundación Masada, con motivo de conmemorarse el «Día internacional Contra la Corrupción».
La Jornada titulada “Enciende la luz, no impunidad”, contó con el apoyo de diversos sectores de la población dominicana, que ven la corrupción como el principal cáncer que afecta la nación.